Cada persona tiene una personalidad dominante y esta a su vez tiene un “núcleo reactivo” que por lo regular domina la vida del hombre. A este núcleo se le suele llamar como “tendencia dominante”. De tal forma que cada ser humano al ser único, tiene una “tendencia dominante” única contra la cual debe luchar.
Ud. tiene que enfrentarse a las dificultades que crea su propia tendencia dominante, la cual puede ser intelectual, emocional o corporal. Si su tendencia es intelectual, entonces esta se sustenta en el movimiento de la memoria, la cual siempre esta elaborando lo que Ud. llama "conceptos". Por otra parte si su tendencia es emocional, entonces existe sobre el movimiento de su imaginación y puede manifestarse como religiosidad, sentido de justicia, amor, deseo, temor o vanidad. Y finalmente si su tendencia se origina a partir del movimiento del cuerpo, esto implicara que Ud. actuara a través de dicho movimiento, lo cual implica un comportamiento "imitativo". Cada una de estas tres tendencias posee su propia complejidad y sus propias pruebas.
De tal forma que si Ud. se entrega a una sola, exclusivamente, rechazando las otras, no descubrirá la plenitud, la suprema realidad; pero dándose cuenta, empero, de las dificultades de cada tendencia, y por lo mismo entendiéndolas, realizase el Todo. Cuando Ud. pregunta si no hay diferentes senderos que conducen a la Realidad, ¿no será porque desea saber cuales son las dificultades y obstáculos con que tropieza cada tendencia, y como se los supera para descubrir Aquello que es real? Para superar esas dificultades y obstáculos, Ud. tiene que ser consciente de cada tendencia y observarla en estado de alerta, con desinterés y pasividad. Manteniendo "su" conciencia constantemente despierta y meditativa, y así, estas tendencias con los obstáculos que nos presentan y la dicha que nos procuran, serán entendidas e integradas en un solo "todo".
